Puede que en ocasiones tengamos la sensación de que Dios no está pendiente de cómo nos encontramos, porque las cosas parecen salirse de control o porque la soledad es grande y la incertidumbre nos invade, pero tenemos la seguridad de que Dios no se ha olvidado de nadie. Tranquilo, no se ha olvidado Confiar en medio de la aflicción no es sencillo, más cuando las cosas empeoran o cuando parece que todo empieza a arreglarse de repente nuevas preocupaciones se suman. Porque me han rodeado males sin número; Me han alcanzado mis maldades, y no puedo levantar la vista. Se han aumentado más que los cabellos de mi cabeza, y mi corazón me falla. Salmos 40:12 (RVR 1960). Aunque las olas golpeen con fuerza contra una fuerte roca, no la moverán ni la dañarán, así mismo son las dificultades en esta vida, cuando uno tiene la fe en Dios, nos golpearán pero estaremos seguros porque Él no se ha olvidado de ninguno. Aunque afligido yo y necesitado, Jehová pensará en mí. Mi ayuda y mi libertador eres tú; Dios mío, no te tardes. Salmos 40:17 (RVR 1960). Dios tiene el control Como hijos de Dios, nuestra vida no depende de la “suerte” sino del Señor, aquel que nos creó, que no improvisa nada, sino que ordena las circunstancias siempre para bien nuestro, y aunque no lo entendamos en el momento, Él tiene el control. Gócense y alégrense en ti todos los que te buscan, Y digan siempre los que aman tu salvación: Jehová sea enaltecido. Salmos 40:16 (RVR 1960). Dios no se ha olvidado de ti, actuará oportunamente en la circunstancia que te encuentres, no dejes de obedecerle y confiar en su Palabra. Artículo producido para radio cristiana CVCLAVOZ.
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